Daniela Centrón es Investigadora principal del CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) en Microbiología, Directora del Instituto de Investigaciones en Microbiología y Parasitología Médica de la Universidad de Buenos Aires, y Profesora en la prestigiosa Facultad de Medicina de la UBA en Argentina. También FTHub Guía de Baños de Bosque, una mente brillante y gran aventurera.
Una verdadera Guía de Viajes viviente además de destacada científica, Daniela ha combinado la investigación y la docencia con prolongados relevamientos científicos en paisajes majestuosos de los parques nacionales argentinos y también de muchos otros sitios en el mundo. Es una de las únicas tres mujeres en todo el mundo que estudian un particular componente del ADN móvil tomando al Medioambiente como modelo biológico.
“Desde chica estuve siempre en contacto con distintos tipos de ambientes naturales, me crié cerca del mar, y los fines de semana o las vacaciones de verano, invierno o Semana Santa en Uruguay iba a la chacra de mis abuelos y a un balneario donde hacíamos casas en los árboles con mis hermanos y primos. En una de esas casas, había un pino marítimo con una forma muy extraña, llamado ‘el árbol de las Hadas’ por mi padre y mi tío, con el que ellos también habían pasado su infancia. Estar ahí con mis hermanos y primos era sentir que por ahí pasaba la vida, que ahí estaba el hogar.
“A los 10 años, jugaba habitualmente con una de mis primas con un juego de química para niños que le habían regalado. Amaba la mezcla de colores y que un líquido de pronto se volviera viscoso. Fue uno de aquellos días en que decidí que iba a ser científica, y esa pulsión estuvo muy fuerte mucho tiempo, y me llevó a hacer la carrera de Biología. Quería vivir la mayor parte del tiempo rodeada de la naturaleza y de los animales y plantas que la habitan. Nunca me arrepentí: esta profesión me lleva y me llevó adonde yo quería».
Vocación y descubrimientos
“Como Microbióloga me especialicé en el estudio molecular de la diseminación de la resistencia a los antibióticos, investigando el ADN móvil y los mecanismos de la Transferencia Horizontal Genética, y en particular los integrones. Hace ya un tiempo tuve un encuentro con 3 colegas uruguayas en un congreso internacional, una que vive en Australia, otra que vive en Uruguay y yo -uruguaya que vive en Argentina-, y éramos las únicas mujeres que presentamos trabajos al respecto. Aunque hubo una australiana pionera, nos dimos cuenta que también lo éramos, y nos reíamos diciendo que para trabajar en este tema debías de ser uruguaya, ya que el resto de los que trabajaban en ello eran hombres.
«Me acerqué a Forest Therapy Hub por una necesidad personal de poder profundizar mi propio contacto con la naturaleza. Y después me sedujo su propuesta: el contacto con la naturaleza es muy personal, es algo único y distinto para cada uno. Me parece que FTHub respeta eso y da herramientas para que cada cual encuentre su forma, sin juzgar si es profunda o no, si es intensa o sutil, sino justamente buscando cada uno la forma particular en que se da ese contacto».
Respeto por la libertad y la punta del iceberg
“En Ciencia hablamos muchas veces de la punta del iceberg, y yo creo es lo que Forest Therapy Hub intenta mostrar, una parte del contacto, para que lo que está en el plano de lo desconocido o no contactado en este caso con la naturaleza, sea el camino para que cada uno de nosotros, en nuestra búsqueda personal, seamos quienes lo indaguemos, desentrañemos y recorramos.
«Esta libertad que encontré en su propuesta me despertó el interés de ser Guía de Baños de Bosque, pues al principio no era mi intención, pero hoy también lo vislumbro como una posibilidad. Me lleva a interesarme por el entorno urbano, donde las personas no tienen acceso a grandes porciones de espacios verdes pero sí tienen mucha necesidad de ellos, de esa conexión con la naturaleza”.
Ph: Cortesía Daniela Centron y Forest Therapy Hub.